1 de septiembre de 2020

 

Información No. 182

 

En el arranque, Ricardo Marcos González, presidente de CONARTE, afirma que la labor de cualquier entidad cultural es fundamental al hablar del devenir de una sociedad

 

Ven como esencial la práctica de los derechos culturales para la dignidad humana

 

Monterrey, Nuevo León. Con un llamado a ver el desarrollo cultural como fundamental para una sociedad, los titulares de los organismos de esta área a nivel regional dieron ayer el banderazo de salida de la edición 2020 del Festival de Arte Nuevo.

 

La labor de cualquier entidad cultural es fundamental en el campo del desarrollo cultural”, manifestó el Maestro Ricardo Marcos, presidente del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León en su participación en el conversatorio Políticas culturales y nuevas realidades, realizado dentro de las actividades delFestival, que se realiza del 31 de agosto al 3 de octubre, bajo el título de Espacios Híbridos, Arte del Norte.

 

“Si se hace una revisión estructural de los organismos públicos estatales nos vamos a dar cuenta que es una de las áreas más grandes en cada uno de ellos, algunas veces están configuradas como direcciones, coordinaciones o subsecretarias, y eso significa que una labor medular que realiza cualquier organismo cultural hoy en día es precisamente en el campo del desarrollo cultural”, señaló el funcionario cultural en este dialogo en el que participaron los titulares de los estados del Fondo Regional para la Cultura y las Artes del Noreste (FORCAN).

 

“Esto lo podemos ver en la ley federal de cultural y en la cual, uno de los puntos clave es propiciar los procesos culturales en las comunidades”, expresó.

 

En dicho conversatorio, participaron, además: María Concepción Landa García-Téllez, Secretaría de Cultura de Chihuahua; José Luis Rodríguez, en representación de Ana Sofía García Camil, Secretaria de Cultura de Coahuila; Socorro Soto Alanís, directora del Instituto Estatal de la Cultura de Durango y Sandra Luz García Guajardo, directora general de Cultura de Tamaulipas.

 

El Festival Arte Nuevo se realiza para ofrecer una amplia mirada al movimiento artístico y cultural que se genera en los estados de Chihuahua, Coahuila, Durango, Tamaulipas y Nuevo León

 

Dicho festival – actividad del FORCAN- abre sus posibilidades para visualizar el trabajo de artistas locales de los Estados del Noreste a través de espacios virtuales de formación y producción artística contemporánea y promoverlos a nivel nacional e internacional.

 

“La cultura la podemos encontrar en cualquier asentamiento o configuración humana, no es que los organismos llevan la cultura a algún lado, la cultura ya se encuentra allí, lo interesante es cómo detonas ciertos procesos y evidentemente está planteado desde la política cultural que se va construyendo desde la parte alta de cualquier organismo”, indicó Marcos González.

 

“Nuevo León ha contemplado a lo largo de este sexenio que los procesos de descentralización, de preservación del patrimonio cultural tangible e inteligible y desarrollo cultural se realicen a través del trabajo con comunidades que están a veces en una posición de periferia respecto a los procesos que generalmente ocurren de una forma mucho más poderosa en la capital del Estado, para que todos los nuevoleoneses puedan tener acceso a estas posibilidades, eso debe ser asumido desde el Estado, no debe estar a la deriva, debe ser un compromiso real de todos los organismo culturales”, subrayó.

 

Los retos de la pandemia del COVID-19

 

“Hoy en día el gran reto para los organismos culturales es poder estructurar a mediano plazo una visión sobre las funciones culturales que tienen cada uno de los organismos culturales”, apuntó Marcos González.

 

“La pandemia del COVID-19 nos hizo reflexionar y tomar medidas al respecto, una parte importante no solo fue ajustarnos a las medidas que nos recomendaron las Secretarías de Salud de los Estados y la Federación, sino también poder mantener una acción y una actividad que es relevante y razón de ser de nuestros organismos, para que pudiéramos seguir teniendo un impacto entre los ciudadanos, al mismo tiempo que apoyemos al sector cultural y artístico.

 

“El paso inicial fue trasladar una buena parte de la programación a los soportes digitales y es un aprendizaje interesante, porque toda la actividad del Estado se vuelve de escrutinio nacional e incluso federal, de la noche a la mañana ciertos programas y procesos que tenían una razón de ser estatales,

 

de pronto se trasladaron a otras partes y muchos de nuestros talleres o conciertos en línea empezaron a ser vistos en otros estados e incluso hasta fuera del país.

 

“Esto significa también”, añadió, “que tenemos una labor pendiente e inmediata, que consiste en refinar esos contenidos de calidad, precisamente por ese escrutinio mayor que estamos recibiendo, al mismo tiempo que cumplimos con los programas sociales en cada Estado.

 

“Mi preocupación y el reto mayor es cómo podemos hacer relevantes, una vez más, los espacios desde el punto de vista tradicional en cuanto a la concepción que tenemos de estas; tenemos espacios cerrados, cines y cinetecas cerradas, orquestas sin poder tocar, y agrupaciones musicales, teatrales, dancísticas, sin la oportunidad de presentaciones”, señaló.

 

Sin duda, dijo, al sector de la cultura que más le ha pegado esta pandemia es a las artes escénicas, porque uno de los conceptos fundamentales eran las presentaciones frente al público y no se pueden dar en las condiciones actuales.

 

“Tenemos que buscar alternativas que vayan de la mano con las recomendaciones de salud para que toda esa labor que veníamos realizando pueda tener una relevancia hacia adelante, porque desafortunadamente este escenario no va a cambiar en el siguiente año, quizá año y medio”, expresó.

 

Por su parte, la Maestra Concepción Landa García-Téllez, Secretaría de Cultura de Chihuahua, habló del papel de las instituciones en la construcción e implementación de políticas públicas y de los derechos culturales.

 

“Los derechos culturales son esenciales para la dignidad humana y forman parte de los derechos humanos”, señaló la funcionaria cultural.

 

“El Estado tiene como obligación garantizar, como parte esencial de la dignidad humana, que los derechos culturales sean ejercidos por cualquier persona, por eso es que las instituciones públicas tenemos la obligación como Estado, ser garantes de que estos derechos culturales se cumplan”, señaló.

 

En su intervención, la Ing. María Socorro Soto Alanís, directora del Instituto de Cultura del Estado de Durango (ICED), señaló la importancia que juegan las instituciones culturales en el desarrollo cultural de los Estado.

 

“Es muy difícil en este momento por la pandemia que viene a cambiar los paradigmas, los métodos, discursos con los cuales habíamos trabajado, por lo menos en lo que va en este siglo”, expresó.

 

“Es difícil también por el cambio del Gobierno Federal que ha instituido una serie de medidas que me parecen acertadas y que se refieren a la trasparencia y redición de cuentas, pero sentimos nos quitan tiempo valioso que debemos aplicarlo al desarrollo cultural.

 

“Y también es difícil en esta relación con los artistas, la sociedad y las instituciones culturales en la nueva realidad, pero encontraremos los caminos a través del talento, la inteligencia, creatividad y la buena voluntad”, señaló.

 

Por su parte, la CP. Sandra Luz García, Directora General del Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes dijo que “en Tamaulipas hemos buscado vincularnos con instituciones públicas en los diferentes ámbitos del gobierno federal, estatal y municipal, generando alianzas que nos permitan poner en acción programas y proyectos que detonen procesos culturales para favorecer el desarrollo cultural.

 

“Y también somos un puente comunicador entre los artistas y sus públicos para acercar la oferta creativa a los diversos sectores de la sociedad y mantenemos una comunicación constante con los creadores y con los diferentes agentes culturales”, señaló.

 

En su participación, el Lic. José Luis Rodríguez, dijo que “en Coahuila vemos un cambio en buena medida con la pandemia y las dinámicas sociales que se han presentado en los últimos años, frente una figura paternalista como antes tenían las instituciones culturales

 

“Hoy en día los papales de las instituciones culturales resultan más como una mediadora; una institución que estimula y propicia estas dinámicas propias de cada una de las comunidades; en este sentido creo es un reto muy importante seguir manteniendo este ritmo y respondiendo a las necesidades tan diversas y amplias de la comunidad.

 

“El papel de las instituciones tenían un garante en cuando al acceso y al desarrollo de los derechos culturales, pero ahora con una visión más horizontal y un ejercicio de las políticas culturales que se acerca a la comunidad y que ya no se deciden desde una oficina y una visión paternalista”, señaló.

 

“Los recursos son cada día más escasos y las instituciones tienen que ser más innovadoras para propiciar la participación de la industria y la iniciativa privada”.

 

El conversatorio se puede ver y escuchar en el siguiente enlace: