8 de marzo de 2021
Información No. 39
Los nuevos becarios del Centro de Compositores de Nuevo León 2021 son Didier Eli Fuentes Reyna, Miguel Alejandro Mata Sánchez, Daniel Alejandro Vera Urista y Oscar Iván González Fabela
El compositor sabe trabajar en la soledad, pero con mentalidad muy abierta a nuevas ideas. Debe ser muy autocrítico y presentar un trabajo que hable por sí mismo, sin explicaciones, afirma el nuevo coordinador
Monterrey, Nuevo León. “La creación musical contemporánea siempre busca la innovación en las técnicas y los lenguajes”, manifestó el destacado músico y compositor Rolando Cruz Elizondo, quien será el nuevo Coordinador del Centro de Compositores de Nuevo León 2021.
“Y son precisamente las nuevas generaciones las que van impulsando ese desarrollo musical. Por eso es tan importante buscar la mejor manera de apoyarlos y guiarlos en ese camino y esa es la labor general del coordinador artístico”, expresó.
Los nuevos becarios del Centro de Compositores de Nuevo León 2021 son Didier Eli Fuentes Reyna, que trabajará en el proyecto Oleadas del fuego y agua; Miguel Alejandro Mata Sánchez, que desarrollará la obra Volubilis: la forma y la microtonalidad como estrategias de composición; Daniel Alejandro Vera Urista con su proyecto La Mixtura Estética en la Superposición y Oscar Iván González Fabela con Evanesce y Destino.
El jurado estuvo integrado por Cristina García Islas, Emil Awad Abed y Mauricio Nader Schekaiban, quienes revisaron y dictaminar los 17 proyectos participantes en la convocatoria del Centro de Compositores de Nuevo León 2021.
La nueva generación del Centro de Compositores de Nuevo León tendrá su primera sesión este miércoles 10 de marzo a las 19:00 horas por medio de la plataforma virtual ZOOM.
El Centro de Compositores de Nuevo León fue creado en 1998 por los músicos organizados en el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León. El proyecto incluyó una convocatoria anual para compositores nuevoleoneses o radicados en la entidad, el inicio de un archivo de autores nuevoleoneses, así como la investigación, acopio y organización de nuevos acervos. La sede del nuevo instituto fue la Casa de la Cultura de Nuevo León y su coordinador técnico, Radko Tichavsky.
Entrevistamos al Maestro Rolando Cruz Elizondo sobre su sentir de Coordinar el Centro de Compositores de Nuevo León, su método de trabajoy el movimiento de creación musical que se vive en nuestro Estado. Aquí les compartimos sus respuestas.
¿Que representa para usted esta nueva aventura de Coordinar el Centro de Compositores de Nuevo León?
Pues son varias cosas muy importantes, pero principalmente es estar frente a una responsabilidad muy grande para la cultura del estado. La creación musical contemporánea siempre busca la innovación en las técnicas y los lenguajes. Y son precisamente las nuevas generaciones las que van impulsando ese desarrollo musical. Por eso es tan importante buscar la mejor manera de apoyarlos y guiarlos en ese camino y esa es la labor general del coordinador artístico.
Según su experiencia, ¿qué cualidades debe tener un compositor?
Mucha disciplina, quizás sea la principal cualidad, pero también son importantes el poder concentrarse en sus ideas, el enfoque bien definido para plasmar en partitura su propuesta musical. También el compositor sabe trabajar en la soledad, definitivamente quizás sea el oficio más solitario que existe, pero con mentalidad muy abierta a nuevas ideas. El compositor debe ser muy autocrítico y presentar un trabajo que hable por sí mismo, sin explicaciones.
Háblenos sobre el método de trabajo que va a desarrollar con ellos.
El Centro de Compositores de Nuevo León siempre se ha caracterizado por la apertura de sus actividades. Entonces para nadie es un secreto que se trabaja en sesiones en colegiado en las que los becarios exponen sus avances en las obras en las que están trabajando y los demás pueden hacer alguna crítica y preguntar sobre los métodos que se estén utilizando. Después como coordinador se les aconseja y determina si hay aspectos en los que se pueda mejorar en cuestiones técnicas y de metodología, pero siempre respetando la personalidad musical de cada uno.
¿Cómo lograr explotar las capacidades musicales y creativas de cada uno de los becarios para obtener resultados óptimos que se reflejen en las obras?
Precisamente con las reuniones, el mismo compositor al escuchar opiniones y críticas a su trabajo puede expandir su visión creativa. El compositor siempre debe estar dispuesto a escuchar diversas opiniones y hasta críticas duras a su trabajo. Es así como cada quien va forjando un estilo musical propio. Además, el trabajo debe estar impecablemente presentado para su ejecución, y ahí es donde el coordinador puede supervisar cuestiones de escritura y técnica en la partitura.
¿Cómo guiar a los becarios para que encuentren su propio estilo musical?
Siempre debe haber unas palabras de ánimo y empatía. Estoy convencido de que se obtienen mejores resultados poniéndonos en los zapatos del otro y buscar una forma específica para cada quien.
Cada persona es diferente y hay que tratar de llegar a ellos de la mejor manera para que ellos mismos se abran y puedan expresar mejor sus ideas con toda confianza.
¿Qué debe buscar el compositor lograr con sus obras?
Definitivamente cada cabeza es un mundo y cada quien vive un momento que es diferente a los demás y por lo tanto cada quien tiene una visión personal de cada aspecto de la vida.
Creo que no hay un solo objetivo en la creación musical más que el de comunicar nuestras ideas y percepción del mundo por medio de la música.
Por último, compártanos su visión sobre el movimiento de creación musical que se vive en Nuevo León.
Como en todos los aspectos de la vida, el arte se ha visto afectado por las situaciones que todos conocemos. Pero creo que hoy más que nunca existe un interés por la creación musical muy importante. Ya tenemos demasiado talento en nuestro estado girando por muchas partes, gracias a las labores de dependencias educativas a través de los años y al trabajo individual de cada compositor, que creo que ya podemos catalogarnos como un importante semillero creativo en el mundo. Por lo menos de los más importantes en el país.
Rolando Cruz Elizondo
Compositor regiomontano, inició sus estudios de guitarra clásica en el año de 1985 en la entonces Escuela de Música de la Universidad Autónoma de Nuevo León, se inició en el estudio de la composición en la escuela de música de la Universidad Regiomontana con el maestro Radko Tichavsky
Ha sido becado por el Centro de Compositores de Nuevo León siendo parte de la primera generación de dicho centro y además ha sido acreedor de la beca de Creadores con Trayectoria FONECA 2003.
Ha tomado cursos de especialización con los maestros Julio Estrada, Rogelio Sosa, Jean Philippe Marthe, Luis Herrera de la Fuente, Manuel de Elías, Juan Trigos, Ricardo Gallardo, Víctor Rasgado, Theo Loevendie, Hebert Vásquez, Mario Lavista, Eugenio Toussaint etc.
Sus obras han sido interpretadas por diversos ensambles como: Tambuco, Cuarteto de Cuerdas de la Universidad de Xalapa, Ensamble de Música Contsemporánea del Conservatorio de las Rosas, Ensamble NURE, Ensamble Noodus, Orquesta Sinfónica de la UANL, etcétera; y han sido publicadas por la UANL en su edición Veritatis.
Ha sido Coordinador Artístico del Centro de Compositores de Nuevo León. (2013)
Es catedrático de la Facultad de Música de la UANL, UVM y en la SEP como asesor técnico-pedagógico, arreglista y director musical del ensamble OCDEP.
Es miembro fundador del Foro de Compositores y es parte del Colectivo “Resonancias” dedicado a la música electroacústica y montaje multimedia. Es fundador y director de Ictus Cuarteto, música original en formato jazz fusion, asimismo es artista sonoro independiente.