23 de marzo de 2021

 

Información No. 58

 

Monterrey, Nuevo León. “La ciudadanía está encontrando opciones de abrir su voz y la Universidad tendrá un papel muy importante en dar las herramientas, la infraestructura y las opciones para que podamos reconocer esas voces y poderlas extraer de una forma adecuada”, manifestó Lourdes Epstein, Profesora Investigadora en la Escuela de Ciencias Sociales y Humanidades del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México en su participación esta noche en la conferencia magistral Abriendo Universidad, Laboratorios Ciudadanos de SlowU del Tecnológico de Monterrey, organizada por  el CONARTE a través del Lab Cultural Ciudadano LABNL y transmitida a través de Facebook Live.

 

“No basta con tener la tecnología para que nuestra voz se escuche, hay que educar nuestra voz, hay que escucharla primero nosotros mismos y creo que esto falta. Finalmente, las comunidades universitarias son un porcentaje mínimo en las poblaciones sobre todo en un país como el nuestro”, manifestó la también Coordinadora del Laboratorio de inclusión: La diversidad como emprendimiento.

 

“Pero no se nos debe olvidar que las Universidades son organizaciones de la sociedad civil, que tienen una labor y una responsabilidad enorme. El tema del servicio social ha sido una tradición, pero de una sola vía, donde se ha considerado a la Universidad como el promotor y el que brinda los beneficios que tienen que ver con la construcción y el entendimiento”.  

 

En esta charla magistral participaron además las catedráticas e investigadoras Mariana Gabarrot, coordinadora del laboratorio ciudadano Ellas Lideran; Magali Lara, coordinadora del Laboratorio Ciudadano de Paz.

 

La charla fue moderada por David Gómez, coordinador nacional de la iniciativa SlowU del Tec de Monterrey.

 

“Ahora, esta filosofía de los laboratorios ciudadanos, lo que nos ofrece es la posibilidad de pensar la Universidad como estos espacios que generan la posibilidad de abrir una conversación, en donde nosotros como universitarios aportamos, pero también recibimos una enorme riqueza a través de una conversación horizontal con el mundo social en que nos desenvolvemos y las comunidades a las cuales servimos”, manifestó Epstein.

 

“Creo que este tema de la Universidad tiene que ver con lo que entendemos por ciudadanía, y cómo podemos codiseñar el mundo, los mundos, que queremos. No hay una sola perspectiva, sino esta posibilidad de nosotros, que reconoce la diferencia y que la está construyendo momento a momento de manera empoderada, pero sobre todo insertada y aterrizada en un territorio, es una epistemología situada, que tiene que ver no solo con cuestiones teóricas, científicas, racionales, sino también con emociones, sentimientos y cuestiones de cuidados”, expuso.

 

Es hablar de la otra voz, dijo, o las otras voces que al insertarse en la Universidad la alumbra y no solo es el faro universitario que enfoca los problemas de la sociedad.

 

SlowU del Tecnológico de Monterrey un vínculo de comunicación con la sociedad  

 

Por su parte, Magali Lara sobre este tema de abrir la Universidad a través de la Iniciativa SlowU del Tec de Monterrey manifestó: “De alguna manera esta es una forma de cumplir la función social de la Universidad; es decir, esa construcción de conocimientos, ese afectar de una manera positiva desde la Universidad y ese dejarnos afectar.

 

“Siendo la Universidad ese espacio, donde es posible influir en la sociedad a través de sus propios conocimientos. Para mí es también cumplir la función social de afectar de una forma positiva la sociedad en la construcción de conocimientos, pero también de aprender de la sociedad, actualizarnos y dejar de estar en un nivel diferente de lo que está ocurriendo. Para los laboratorios es ese vínculo para fortalecer esta función social y esta deuda que la Universidad tiene con la sociedad”, señaló,  

 

En su intervención, Mariana Gabarrot felicitó a CONARTE “por la apertura del LABNL, por este proyecto tan ambicioso en el sentido de llevar a cabo estos laboratorios a gran escala en Monterrey; me parece un esfuerzo bien interesante, un experimento social, que hasta el momento no se había hecho en el Estado”.

 

Transformar el Servicio Social  

 

“México es un país que históricamente ha tenido Servicio Social obligatorio, lo que significa que las Universidades por ley tienen que abrirse históricamente a la sociedad;  ha habido ese compromiso de la labor universitaria y  me parece importante que el esfuerzo en el SlowU del Tec de Monterrey tenga que ver con trasformar cómo se ha estado haciendo el Servicio Social, porque de alguna forma, históricamente el Servicio Social comunitario suele ser un poco colonizante de las comunidades; es llegar y llevar una idea de lo que significa el progreso, el desarrollo, incluso lleva una idea de lo que es lo social”, indicó Gabarrot.

 

“Y creo que las Universidades han sido cada vez más conscientes que esto excluye los saberes de las comunidades, y me parece que el enfoque dialógico, del cuidado horizontal de los laboratorios sea llevado a un proyecto como el Servicio Social universitario, porque eso va a cambiar positivamente. El Tecnológico de Monterrey en ese sentido está proponiendo un modelo innovador de abrir la Universidad a través de algo que históricamente ha sido un mandato desde lo legal. Es como reinventar ese mandato y dar la oportunidad a nuestros estudiantes de que se relacionen con la sociedad de otra manera”, apuntó.

 

Los laboratorios cuidadnos, agregó, ofrecen una oportunidad para abrir espacios desde lo local, porque de alguna manera la experiencia de los laboratorios es ir al encuentro de las comunidades situadas en territorios y contextos muy específicos.

 

“Entonces la Universidad hoy por hoy tiene el privilegio de ser un vínculo entre lo local y lo global y lo interesante, además es que este vínculo con MediaLab, que permite confrontar experiencias con otros laboratorios de otros estados del país y del mundo”, señaló.

 

El SlowU del Tecnológico de Monterrey es un laboratorio de innovación ciudadana que propone la lentitud y el hacer abierto, colaborativo, experimental, afectivo y replicable como forma de transformar la Universidad.

 

Video de la transmisión: