25 de agosto de 2022

 

Información No.

 

La destacada artista visual impartió el taller “Fotografía del retrato”, como parte de las actividades alternas en torno a la exposición “Tufic Yazbek. Presencia Singular”

 

Dicha muestra se encuentra en sus últimos días en la Fototeca Nuevo León del Centro de las Artes

 

Monterrey, Nuevo León. “Al hacer fotografía hay que ser uno mismo y auténtico”, manifestó la destacada artista visual y fotógrafa regiomontana Rosalinda Olivares, quien impartió el taller “Fotografía del retrato”, en el Aula Taller del Centro de las Artes de Conarte.

 

“Tienes que serle fiel a tus pulsiones y a las cosas que nos mueven, que nos gustan, al final eso es lo que te hace original”, expresó.

 

Olivares ofreció este taller los días 10, 17 y 24 de agosto, como parte de las actividades alternas en torno a la exposición “Tufic Yazbek. Presencia Singular”, que aún puede visitarse hasta el domingo 28 de agosto en la Fototeca Nuevo León del Centro de las Artes.

 

“Si a mí me gusta retratar a la gente de cierta manera y forma, eso es lo que me hará, no buscando copiar a alguien más. Creo que al final se trata de encontrar una voz y eso la tenemos adentro.

 

“El retrato es un intercambio entre el fotógrafo y la persona que es fotografiada. En ese proceso pasan muchas cosas. Hay como un diálogo a veces silencioso entre los participantes. Todo se refleja. Cuando alguien me toma una foto, la persona también aparece allí en la foto de alguna manera, quizás suena muy poético, pero para mí es así”, indicó.

 

Cómo hacer un buen retrato

 

Para hacer un buen retrato, apuntó, hay que ir a lo más simple.

 

“Como le digo a mis alumnos: lo primero que tenemos que aprender es a observar la luz. Tienes que esta observar la luz todo el tiempo y ser uno con la cámara; tienes que estar viendo cómo entra la luz a tu casa, cómo es en la mañana y en la tarde, cómo le pega a tu mano y cómo es alrededor, además cómo te acercas al objeto o a la persona que vas a fotografiar porque eso va a impactar mucho en tu fotografía”, dijo.

 

“La mejor luz para hacer retrato es la que está disponible, tienes que saber hacer un retrato con la luz que tienes. Pero, si me das a elegir, a mí me gusta mucho la luz natural, la luz suave, así como el atardecer en una tarde de verano”, mencionó.

 

“Si te acercas de una manera muy brusca a una persona, va reaccionar de cierta forma; si llegas hablándole, esa persona será de cierta manera y finalmente, tienes que tener muy clara la intención del tipo de retrato que quieres lograr”.

 

Todo gira, añadió, en torno a cómo hacer sentir a alguien, eso se va a ver reflejado en el retrato.

 

“Tiene que ver en cómo haces sentir alguien, si se siente cómodo o incomodo, feliz o triste, tú llevas y guías a la persona cuando la estás retratando. Siempre hay un diálogo silencioso entre quien retrata y la persona; es una conexión que logras establecer con la persona, a veces se logra y otras no. Es algo que se logra con el tiempo”.

 

Le encanta el retrato de Tufic

 

“El retrato de Tufic Yazbek me encanta porque no se limitó a hacer un solo tipo de retrato por la época en la que estuvo vigente; sí hacía estudio y retrato de artistas que me fascina, pero de pronto brinca a hacer moda y vida cotidiana, él explora, era como este campo expandido”, manifestó Olivares.

 

“Él exploraba varias áreas, diversos territorios de la fotografía, no se limitaba y su trabajo es fascinante, te puedes quedar viendo una foto por varios minutos y es toda una historia”.

 

Rosalinda Olivares (1987)

 

Vive en Monterrey, Nuevo León. Es Licenciada en Diseño y Mercadotecnia en Modas en el Centro de Estudios Superiores de Diseño de Monterrey (CEDIM). Participó en el Programa de Fotografía Contemporánea 2018 Fundación Bancomer en el CECUT, en Tijuana, BC y en el PFC15 en Monterrey. Su trabajo es parte de la plataforma digital PICS del Centro de la Imagen desde el 2017. Su obra ha sido exhibida en Fototeca de Nuevo León, en el Centro Cultural Tijuana, Baja California, en la Fototeca de Zacatecas y en el Centro de la Imagen en Ciudad de México, entre otros espacios. Su trabajo ha sido publicado en medios digitales y publicaciones nacionales e internacionales. Su trabajo gira en torno a la afectación del tiempo en el espacio y las personas. Aborda temas de identidad, feminidad y tiempo. El impulso por la indagación y justificación a partir de lo anecdótico, performático o ficticio se convierten en los principales ejes de su proceso creativo. Trabaja como fotógrafa retratista, documental, comercial y de sociales desde hace más de 10 años.