7 de julio de 2020

 

Información No. 128

 

En sesión de Crónicas Municipales del COVID-19, Hortencia Camacho Cervantes, cronista de la población, plantea que dicha localidad experimenta como reto recuperar la tranquilidad a como se percibía antes de la pandemia

 

Monterrey, Nuevo León. Con la pandemia del COVID-19, la población del municipio de Anáhuac, Nuevo León, se debate entre el miedo, la incertidumbre, la desconfianza, la violencia, y la incredulidad, manifestó anoche la maestra Hortencia Camacho Cervantes, cronista de la localidad, en su participación en el programa Crónicas Municipales del COVID-19, transmitido por el CONARTE a través de Facebook Live.

 

“En general tenemos miedo, pero nos gana a veces que somos personas muy abiertas, libres; la gente de Anáhuac es más campirana, muy alegre y seguimos con lo que vemos en todos lados, las carnitas asadas y la música a todo vuelo y la vuelta en camioneta en el carro, que es una tradición de toda la vida”, señaló.

 

“También tenemos el problema de que somos una región fronteriza, hay mucho flujo de gente en ambos sentidos, pero la afluencia es mucho mayor de personas que vienen de las ciudades fronterizas de Estados Unidos”.  

 

El arquitecto Sergio Rodríguez, jefe de Proyectos Apoyos Municipales de CONARTE, estableció un diálogo con Camacho Cervantes sobre la historia de este municipio y el impacto de la pandemia del COVID-19 en la comunidad.

 

Medidas de prevención

 

“Las autoridades municipales han hecho su labor, difundiendo intensamente las medidas sanitarias de prevención, ya van en la décima brigada de entrega de paquetes con productos de higiene, charlas informativas, túneles sanitizantes y filtros a la entrada de las principales comunidades.

 

“Hay muchas recomendaciones, porque hay mucho riesgo. No hay mucha gente enferma, contagiada por el virus, pero sí hay muchos problemas de salud, gente con diabetes, hipertensión, obesidad, e insuficiencia renal, es población de riesgo, por su condición de salud”, señaló Camacho Cervantes.

 

“No tenemos hospital, a pesar que tenemos una población de más de 25 mil habitantes, y mucha población flotante, porque es un asentamiento fronterizo y se mueve mucha gente de la frontera hacia esta región”.

 

Desde hace años, agregó, se espera que construyan un hospital de segundo nivel, pues el más cercano está en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y los otros en Sabinas, Coahuila, y Sabinas Hidalgo, son más de 100 kilómetros de distancia.

 

Ciudad única en el mundo

 

Una característica que hace único al municipio de Anáhuac, Nuevo León en México y quizás en el mundo, es la forma radial que tienen sus calles principales. En el diseño y construcción de la ciudad participaron ingenieros y técnicos de la Comisión Nacional de Irrigación preparados en universidades parisinas que escogieron trazos y diseños arquitectónicos modernistas.

 

“Fue un ambicioso proyecto federal de desarrollo económico, político y social. Se deseaba que se poblara la región de la frontera, que hasta entonces estaba desocupada, ya estábamos a principios del siglo 20.

 

“Era un proyecto de la posrevolución, la idea era construir una ciudad agrícola industrial moderna fronteriza y para ello construyeron una presa, haciendo canales, drenes, repartido tierra irrigable, para que la gente llegara a sembrar y tuviera la posibilidad de trabajo digno”, manifestó la cronista.

 

La ciudad se construyó con un estilo moderno, explicó la cronista; los ingenieros constructores escogieron como modelo las ciudades europeas más modernas. Es ese estilo art déco tan característico de la ciudad.

 

“Los primeros pobladores, eran peones agrícolas, repatriados, desposeídos. La tierra no se entregó gratuitamente a la gente, se le vendió a crédito y bajo precio; fue adquirida y pagada a través de los años con créditos bancarios del gobierno federal”, señaló.

 

Anáhuac se sitúa al norte del estado de Nuevo León en la región denominada Llanos Esteparios del Noreste o Llanura Costera del Golfo. Es el único municipio nuevoleonés que limita con Estados Unidos, además de con los estados de Coahuila y Tamaulipas.

 

Su nombre proviene del náhuatl, que en español significa ‘lugar cerca del agua’. Fue creado oficialmente en 1933 a partir de territorio previamente correspondiente al municipio de Lampazos de Naranjo que ahora colinda al sur de Anáhuac.

 

La presa Venustiano Carranza, mejor conocida como Don Martín, que riega el municipio. El clima es semidesértico, con escasas lluvias y temperatura extrema.

 

El 29 de mayo de 1935 la ciudad fue declarada cabecera del municipio de Anáhuac, integrando como territorio municipal, no solo a dicha población, sino también a las comunidades aledañas al río Salado. En 1978, por decisión del Gobierno del Estado, se anexó al territorio municipal la comunidad en aquel entonces abandonada de Colombia. Desde 1992, el municipio de Anáhuac recibe las contribuciones federales por el uso comercial del puente internacional Colombia-Solidaridad, mejor conocido como Puente Colombia, El cual es el único paso fronterizo que existe entre Nuevo León y Estados Unidos.

 

La transmisión de esta actividad está disponible en la siguiente liga: